dite

jueves, 16 de septiembre de 2010



Confesión de embriaguez
Me duele terriblemente la indeterminación con que sigo sonriendo, y trato de escuchar en vano el sonido del impacto que produce la luz al estrellarse al suelo. Discuto acaloradamente contra el mareo que se derrama sobre mi cabeza; me han anclado al cemento, no resisto mas mis parpados, sobre ellos yacen toneladas de plomo, y pesan tanto, y arden tanto, mi cuerpo es verdaderamente un trapo, mi equilibrio se siente tan ofendido como un cigarro que dejan a medio fumar. La mayoría de tus palabras se cristalizan antes de impactarse contra mis oídos dolientes y hastiados de funcionar, otras llegan desde una lejanía oscura como asfalto, flácidas tan moribundas que producen lastima, otras castigan hasta sangrar.
Estoy perdiendo el control, me aferro a él, pero la gravedad me reclama; mientras que el fondo de mi escucho a alguien que dice: “Así tan aturdido bombeo la sangre con dificultad, escúchame latir, estoy perdiendo el control; a veces consumo fiebre , el frio me almacena en su estomago blanco, el sueño a enviado sus buitres a la espera de mi voluntad agonizante, esta pálida y sus ojos languidecen, fríos como metal, ahora su cadáver yace en el pasto contorsionado de una forma grotesca; como un desecho del verdugo dispuesto a entregarse a la descomposición. He perdido el orden de las cosas; la situación se escurre entre mis dedos como peces infectos de pánico, peces asustados, estúpidos. Mientras escucho semejantes cosas; en mi cráneo hay elevaciones de unas materias volátiles, giros, cataratas inmensas de humo exquisito que exhalo con intensidad filtrándose así en cada neurona, en cada átomo de lo que soy; desde esta perspectiva (esta palabra me recuerda no sé porque razón a Ortega Gasset), lo veo todo con absoluta claridad, me veo en una bajada gigantesca y no tengo frenos, la velocidad me lanza con violencia (como si fuera un peso inerte), en una especie de basurero astral.
Vuelvo mi atención a la voz torturada y delirante del interior ya le escucho decir:
-Señor Valdemar… ¿puede explicarnos lo que siente y lo que desea?
-Despiérteme, le digo que estoy muerto.
Esas palabras tienen polvo estaban sepultadas en mi inconsciente, ya que alguna vez me propuse recordarlas son hermosas.
Volviendo a nuestra oxidación mental, el problema es que no puedo recordar; el problema es en que no puedo recordar, el problema reside en que no puedo contener, me derramo estoy hecho liquido volátil, la razón se aleja soltado mi mano, alguien jalo el gatillo, en la compresión explosiva actúa en reversa, luego regresa y nos desmorona como estatuas de sal volteando hacia atrás, todo está girando en un desorden magnifico y apetecible, todo gira en un desorden estúpido. No creo poder distinguir lo objetos en este estado, no puedo caminar mi sombra negra de perversidad hace que resbale y me inyecta vértigos desplazándose por mi sangre confusa. Conducirme es demasiado difícil, y aun en la paranoia es necesario tener un poco de cordura, aunque Klee es imbécil, no distinguís nada en él, y Pollok es demasiado minimalista. Baskiat conjugando la luz, establece un verbo visual, conjugable tan solo por la vista y limitado completamente a ella.
Espera hay demasiada confusión, hay demasiado desorden, pero está bien, y me siento verdaderamente idiota. ¿Sera tolerable que no importe? Si definitivamente lo peor y más horrible es actuar con cabeza fría, además es tarde no podre trabajar (la responsabilidad se ha vuelto mecánica estoy vuelto un engranaje, nunca quise serlo que irónico), no estoy en condiciones de nada, las horas pasan tan desconocidas sobre las huellas de mis manos se extiende como una cadena de hormigas rojas.
Respiro y empiezo a recordar donde estoy, y puedo decir con seguridad que no me importa, no lo hace créelo, todo viene y va, como siempre. Hoy menos que nunca puedo seguirlo, hoy más que nunca todo el movimiento humano me es indiferente, ya conoces mi indiferencia por todo cuanto existe.
Así que no me reproches nada en absoluto(creo que el señor Valdemar a despertado, ya no lo escucho) la rectitud de mi razón baila como una llama, el sueño esta escavando un poso cóncavo en cada ondulación de mi cerebro... maldita sea, y pensar que debo pasar a casa a cambiarme, a tratar de aparentar mentiras inaparentables, ante mi, antes los demas; "ser mejor", que pedante frase, mi cabeza pesa demasiado su pesa me succiona en un abismo que se atrae asi mismo.


domingo, 11 de octubre de 2009

imago



Imago

Entre los diversos matices que constituyen nuestras vastas marañas síquicas, semejantes incluso a los intrincados esqueletos de acero y concreto en el interior de mástiles urbanos, la imaginación contiene cualitativa e inteligiblemente un valor descomunal; enorme, colosal, incomprensible,inexplicable, sublime, infinito. Es tener la llave de la puerta que no se debe abrir, es hacer decender las nubes sobre la campiña impregnada de variados matices verdes, amarillos, azules, fluidos, rítmicos. Una sinfonía divina, es la invitación a beber de la copa donde las múltiples posibilidades nos esperan con los brazos abiertos, miradas relucientes lánguidas y coquet
as. Es una delicada prevocación que naturalmente nos permite decender entre lo inexplicable, para crear entre los ritmos de la parábola maquinas coléricas, a las que enfrentan guerrerillos deviluchos en las regiones capsulares de los perros del aire, son esas esporas de luz atrapadas en el interior de tus ojos al tratar de conciliar el sueño. Es trepar por el humó en lo secreto; donde la oscuridad se perfuma con misterio, con ella el olor, el color y el tacto constituyen otro sentido delicado que se forman en los rostros de estatuas sombrías y decrépitas que habitan calladamente en un viejo camposanto apenas sostenido en lo increado de nuestros sueños olvidados, esto acresenta el sentido de la inmensidad, es decir, que eleva las potencias del alma hacia esferas multidimensionales; que la hinchen de voluptuosidad, y la llevan flotando inerte en una suave brisa perfumada y fresca a transgreder los limites de todo para poder habitar dulce y perezosamente en lo ilimitado.



MUNDO ALTERNO


Cuando vagaba en los senderos de un campo
magnético
mis ojos en el rostro
recogían glotones las exalaciones del triste
crepúsculo.
afilando la pupila entonces
encontré un mundo alterno.



Soslayando la ironía
volaron las flores buscando néctares
volátiles en las esquivas
mariposas que habitan jardines
alisios y vacilantes.

En este mundo alterno

el sol mengua la luna solsticios intenta
hacer.
sobre el mar oscuro y brumoso
como arañas avansan las tormentas de
artejo eléctricos
fulminando a los peregrinos que montan
en caballitos de mar.

En este mundo alterno

bajo en el bosque
bajo la estera durmiente
necrópolis amarillenta de hojas muertas
transmutan la luz en sombra
las hormigas ladradoras.



En este mundo alterno
saltando entre las sarsas y los muérdagos
el duendecillo de la leche vestido con
andrajos de vialactea recoje el
crepúsculo en su botella de polvo cósmico.

En este mundo alterno
ondulan suaves colicionan nefastos
entre su capas tectónicas embriones de silencio
van germinando por el relieve membranoso
es como un fluido durmiente que chapotea en el oído
es descansar sobre la piel de un sonido
inaudible misterioso.



En este mundo alterno
cerpenteando entre las nubes
hay un rió aéreo y volátil
en sus orillas crecen flore y arboles
de exquisita belleza ella suspira entre los elfos exalando
una melodía orgiástica de lobos negros.

En este mundo alterno
un chacal imaginario
vaga en las dunas de pintura
son pergaminos demolidos en ese vasto promontorio
erizado por la desolación y la
decadencia.

En este mundo alterno
el ultimo segmento de la
noche
tensado sobre vuestros ojos
lúgubre se aferra a la inmensidad como voces
convulsas que se estremecen en un pozo profundo
incrustado en el bosque de pupilas
rojas.

En este mundo alterno
siempre suave
se desliza
una agradable brisa
con sus mascotas
nos acaricia.

En este mundo alterno
exalan por los bordes de su esfera
jardines de magnificas flores
entre las olas de su aroma nos retuercen la razón
mientras que flotando en las mareas
ángeles y demonios
se extinguen en la superficie de la espuma marinera.

En este mundo alterno
vivimos blancas nubes
sin ningún afán
llevados por la brisa hasta la extensión de mar
perfumado
por colores suaves.






JUNTO AL VIENTO
Viento
Corsario altivo que tu vela izas en los cielos azulinos
Tu nave en el horizonte los sueños del
Kraken
No osaron tu camino turbar jamás
Navegando en el álbor de las mas sinuosas nubes
Elegantes
Llevame a la Grecia de sueños y lacónicos antaños
Llevame al reflejo suspirar
Llevame a ese mar de brisas cálidas
Donde las olas salvajes galopan y
Se estrellan con furia en las rocas del salitre.
Viento
Corsario altivo que tu vuela izas en los cielos azulinos
No vaciles mas te imploro
La luz es fuerte
Atisbando el fondo de mis tinieblas
Las sombras diurnas movidas por la brisa
Son hojas huérfanas y humilladas
Que enmudecen a tú paso
Allá donde los espitafios crean bosques
Y dormitan sentados cabeceando su insomnio
Te paseas corsario altivo e indiscreto
Susurras entre los árboles
Mueves las sombras
Aclarecidas por el sol
Corsario de ébano y marfil
Anchas son las velas de tu barco
Empopan lamentos en sus cantares
Épicos
Hojas color mate
Destruidas por el tiempo la
memoria y la inclemencia
hastiados dejas a los campos de ellas
Pidiendo al verano tregua.
Viento
Corsario altivo que tu vela izas en los
Cielos azulinos
llevame a recorrer las oquedades del
mundo
Hasta que ya los murciélagos no nos
acompañen en el noche
Llévame a recorrer las oquedades de lo
imposible
Llévame a recorrer las oquedades del
Sentir
¡y del mundo aléjame!
¡y del tiempo aléjame!
¡y de los realidad aléjame!.
Viento
Corsario altivo que tu vela Izas en los cielos
Cristalinos
me extingo sobre los sonidos rotos de la imperactividad
Buscando en los cuentos desconocidos
Donde no hayan verbos
Ni adjetivos.
Corsario altivo de los cristalinos cielos
Puerto
No conoció tu barco
Solitario.

viernes, 2 de octubre de 2009

Miramos el abismo, sentimos malestar


Miramos el abismo, sentimos malestar y vertigo


Estamos al borde de un precipicio. Miramos el abismo, sentimos malestar y vértigo. Nuestro primer impulso es retroceder ante el peligro. Inexplicablemente, nos quedamos. En lenta graduación, nuestro malestar y nuestro vértigo se confunden en una nube de sentimientos inefables. Por grados aún más imperceptibles esta nube cobra forma, como el vapor de la botella de donde surgió el genio en Las mil y una noches. Pero en esa nube nuestra al borde del precipicio, adquiere consistencia una forma mucho más terrible que cualquier genio o demonio de leyenda, y, sin embargo, es sólo un pensamiento, aunque temible, de esos que hielan hasta la médula de los huesos con la feroz delicia de su horror. Es simplemente la idea de lo que serían nuestras sensaciones durante la veloz caída desde semejante altura. Y esta caída, esta fulminante aniquilación, por la simple razón de que implica la más espantosa y la más abominable entre las más espantosas y abominables imágenes de la muerte y el sufrimiento que jamás se hayan presentado a nuestra imaginación, por esta simple razón la deseamos con más fuerza. Y porque nuestra razón nos aparta violentamente del abismo, por eso nos acercamos a él con más ímpetu. No hay en la naturaleza pasión de una impaciencia tan demoniaca como la del que, estremecido al borde de un precipicio, piensa arrojarse en él. Aceptar por un instante cualquier atisbo de pensamiento significa la perdición inevitable, pues la reflexión no hace sino apremiarnos para que no lo hagamos, y justamente por eso, digo, no podemos hacerlo. Si no hay allí un brazo amigo que nos detenga, o si fallamos en el súbito esfuerzo de echarnos atrás, nos arrojamos, nos destruimos.

martes, 22 de septiembre de 2009

CABEZA DE PERRO de Goya El cuadro mas lindo del mundo

El cuadro mas lindo del mundo definitivamente la simpleza del trazo, la simple perspectiva de la verticalidad demuestra talves la indefencion de los seres ante la basta creacion del todo si no tal vez incomprensible; es un cuadro sumple nimbado por una luz sombría, por colores oscuros. Es parte de las pinturas negras de este gran creador, definitivamente el mejor cuadro de todo el mundo.

jueves, 23 de abril de 2009

VASTEDAD


VASTEDAD

Hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo,
que no venia tras mi casa a fumar un cigarrillo, a amarrar mi mente en el humo para que se elevase y se fuera en la brisa a cualquier otra parte; hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo que no venia tras mi casa a pensar en cualquier tontería; hace tanto que no venia a buscar las huellas de las nubes en la tristezas de mi jardín, a desenterrar cadáveres de ideas imposibles, de sueños en descomposición cubiertos de abismos, vastos sonidos en la inmensidad.
Hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo que me olvide de mi mismo,
que parece como si antes no hubiera vivido, como si acabara de nacer en este mismo instante.
Hace cuanto tiempo, hace tanto tiempo: que no subo por la escalera hasta la estrella donde mi cuerpo adquiere mil sentidos nuevos, hace tanto tiempo que no vengo a planear estrategias de como un mosquito puede vencer en batalla cuerpo a cuerpo a un elefante.
Hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo que no vengo tras mi casa a buscar sin encontrar algo que no existe, hace tanto tiempo que no me dejo asustar por fantasmas imaginarios, hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo.........que no paseo por las nubes en bicicleta, y hace tanto tiempo que no he querido robar el azul muerto del cielo nocturno; hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo no venia a crear paraísos soñolientos y perezosos en las huellas dactilares de una milésima de segundo. hace tanto tiempo....... que no venia a tirar mis deseos al viento, hace cuanto tiempo que no venia a soñar sin ningún remordimiento de que mañana deba despertar.
Hace tanto tiempo, que no perdía mi mirada en el infinito, hace cuanto tiempo no acariciaba mi gato sedoso, hace tanto que no venia al funeral de otra hora moribunda colgando del reloj, y hace tanto que no veo volar los barcos por el cielo y navegar los aviones por el mar, y hace todavía mas que no paseo en mi camello por los desiertos de la luna, hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo........que vive en mi cara la palidez y mi espejo sufre de depresión crónica, hace cuanto tiempo, tengo tanta hambre porque antes mi mente igual que un bebe se alimentaba de los pechos de la locura, madrastra como ninguna otra que deleita las telarañas de mi cabeza en delicioso desorden.
Hace tanto tiempo, que no voy con Alicia al país de las maravillas, hace cuanto tiempo....que se me olvido el nombre de los días y ahora nada distingue un día de otro y no se si nací ayer o si morí anteayer, ¿si existo hoy?.
Hace tanto tiempo que no venia tras mi casa a perderme en la infinidad de la Vastedad de todo lo imposible, hace tanto tiempo existo dando puntapiés al tiempo para poder matarlo de alguna manera, como si no es el quien nos mata, buena y vieja verdad, hace tanto tiempo todo tiene un valor tan absurdo, y mas tiempo aun que no nadaba en una gota de alucinaciones desorbitadas y nocturnas. Hace tanto tiempo, hace cuanto tiempo que el verano no es una luciérnaga que atrapar con mis manos, hace tanto tiempo que este pez no chapotea en una gota de oxigeno.
Hacia tanto tiempo, hace cuanto tiempo me escondo entre los arboles de mi mismo, hace tanto que no cultivo agujeros negros en un frasco de vació.....hace tanto.... pero esta noche se ha volcado la jaula mental, mas suave que una pluma mas, ligero que el aire me voy montado en un eco, hasta la mas profunda soledad, a pensar; sobre todo soñar, a tocar una guitarra imaginaria en las colinas de mi universo; el mas sombrío, el mas lejano, el mas espectral estanque en la región de las sombras movedizas, estoy parado sobre la muralla, aquella que me oxidaba la vida impidiéndome escapar, estoy volando, vuelo con las alas de un eco, soy el universo, soy tan diminuto que agonizo en la sentencia, he borrado el bien y el mal, en la Vastedad que todo lo envuelve, me deslizo en el vació, sobre un eco de locuras fascinantes a las cuales hace mucho tiempo no accedía.




jueves, 12 de febrero de 2009

INERCIA


INERCIA

Hace algún tiempo por soleada mañanas
Leyendo
Tras mi casa el viento rondaba agradable solitario y
Salvaje
Al pasar los días respiramos el aroma de la amistad pintado de
Confianza.

Yo alimentaba al viento como a mi mascota
Pasábamos las horas cavilando
solitarios y taciturnos
a mi lado suave se
deslizaba
me placía diluir mis ojos en su
invisibilidad
y dejarme llevar por las evoluciones rítmicas de sus
fantasías.

Yo alimentaba al viento
Con dulces y carnosas y aéreas
Palabras que recogía en los límpidos campos de
Inspiraciones arabescas.

Yo alimentaba al viento
Soplábamos las hojas secas del
Verano
Mientras sembrábamos torbellinos en las manos de los días
Cálidos.
Yo alimentaba al viento
Pero hoy
Cada tarde nubarrosa de invierno cuando las
Las nubes se desmayan y
Los caminos se deleitan al convertirse en ríos
Caudales infantes
Antes el viento
Quien en sus espaldas feliz me dejaba cabalgar
Se aleja
Susurrando entre los a árboles arrullando sus ramas
Se aleja y no me escucha
Mas.

Yo solía alimentar al viento
Pero
Hoy por soleadas mañanas
Leyendo
como una botella me he vaciado de
Palabras
Hasta quedar blanco como nube estancada y sin
Rumbo
estoy vacío
todas mis palabras se vertieron en sombra mudas y
blancas.

Tal vez algún día la sombra de mi alma errante
Libre de vaguedades
Vuele
Por si misma con fascinante y voluble habilidad
Vague
disuelta en el sedeo esplendido de la
lluvia y el viento.

Richard enero y 2009

viernes, 30 de enero de 2009

letargo


LETARGO

Cuando habrás tu puerta
Cuando habrás tus ventanas
cuando dejes la maleza crecer
Cuando puedas lanzarte al vació y escuchar
En la caída el canto silencioso del
cielo.

Cuando pruebes del árbol
retorcido
de las maquinaciones
los frutos carnosos en dulzura y
lechosos en ultramarinos.
Cuando habrás tu mundo a los
torrentes fluorescentes
de lo imposible.

Será entonces cuando de las manos del
viento
beberemos las aguas saltarinas de la
libertad absoluta y
vuestros ojos podrán alargarse y
en un exquisito éxtasis tentar el
infinito.

Podréis cual saltamontes
brincar de nube en nube
de meteoro en meteoro
podréis como un vaho sonámbulo
dormitar
en las fases de la luna
devorando sin fin sus tenues y
espectrales rutilancias.

Yo os seguro que todo eso probé
pues acostado en las alas de esa exótica tempestad
fui lanzado a éteres
de playas coloridas y encantadas.

Desde entonces me rodeo de
atmósferas crepusculares
teñidas
por desvaríos volátiles
que orbitan en las texturas
silenciosas
de eclipses subterráneos
escurriendo
entre minimidades extraordinariamente
gigantes y
rodeados por mágicos y luminosos
deleites misteriosos
deslizantes entre espaciosmutantes y
sombras de esperanza
roídas

Desde entonces sonrió a
mundos nocturnos
de claridades palpables de movimientos
milenarios y
molusticos de sensaciones
cóncavas de brazas
hundiéndose mas y mas
en esa beatitud poética que
todo lo absorbe hacia su
centro
de embriagados y pálidos
letargos.